¿Problemas con la vuelta al trabajo?

 

Tras un periodo de trabajo llega el momento de las ansiadas vacaciones, asociadas normalmente con una época de descanso, de relax, felicidad.

Por eso, cuando ese momento se acaba y comienza de nuevo el trabajo y la rutina de la vida diaria con todo lo que eso supone (prisas, atascos, ruido, estrés, etc.) se produce en nuestro organismo una reacción fisiológica y también psicológica que se caracteriza por el cansancio, hastío, la tristeza, melancolía, malestar general o incluso ansiedad.

Todos estos síntomas son propios de un problema de carácter transitorio que puede llegar a complicarse si no se trabaja a tiempo.

Se trata de la «Depresión Postvacacional» y esta fundamentado en un problema de adaptación.

 

Pasar de estar tumbado varias horas en la hamaca de la piscina durante un largo periodo de tiempo a comenzar a madrugar para mantener un esfuerzo continuado durante todo el día, junto con la presión laboral provoca en nuestra persona un Shock que precisa de un periodo de adaptación para integrarlo, de nuevo, dentro de nuestras rutinas.

Este periodo de adaptación al entorno laboral tras un periodo de vacaciones suele durar en torno a los quince días, tras los que los problemas de índole psicológica adquiridos suelen desaparecer.

Aunque esto no siempre sucede y, en ocasiones, se detectan problemas de especial importancia que pueden llegar a ser especialmente relevantes.

 

Herramientas para mejorar:

 

Durante los primeros días de vuelta es importante evitar perder nuestra salud y calidad de vida a costa de este síndrome tan dañino.

Para ello, hay que intentar que en esos días el trabajo sea lo mas agradable posible, huir del «atasco monumental» de tareas atrasadas, e introducir cambios progresivos en el ritmo y rendimiento laboral parar superar ese colapso de los primeros días.

Evitando los autodiálogos negativos (que no nos llevan a ninguna parte) y potenciando aquellos hábitos saludables y positivos practicados durante las vacaciones (comunicación, diversión, sentido del humor, deporte) son unas estrategias sencillas y muy eficaces para neutralizar este «síndrome postvacacional».

Si después de introducir y mantener estos nuevos hábitos sientes que tu vida se desborda, siempre puedes acudir a la consulta de un profesional que te ayude y aconseje para recuperar la normalidad que necesitas.